Casilla 75: Arrendamiento. Inmueble

¿Qué es una casilla 75?

La casilla 75 se refiere al arrendamiento de un inmueble en la declaración de la renta. En términos más simples, es la parte del impuesto sobre la renta donde se declaran los ingresos y gastos relacionados con el alquiler de un bien inmueble.

¿Quiénes deben declarar en la casilla 75?

De manera general, todos aquellos que sean propietarios de un inmueble que sea alquilado deben declarar en la casilla 75. Esto incluye tanto a personas físicas como a empresas.

Además, también deben declarar en esta casilla aquellos que tengan un contrato de arrendamiento con opción de compra. En este caso, deben declarar los ingresos percibidos por concepto de alquiler en la casilla 75, y en caso de que se ejecute la opción de compra, se deberá declarar en la casilla 36 como ganancia patrimonial.

¿Qué se debe declarar en la casilla 75?

En la casilla 75, se deben declarar los ingresos percibidos por el alquiler de un inmueble, así como los gastos relacionados con dicho alquiler. Es importante tener en cuenta que tanto los ingresos como los gastos deben declararse en su totalidad, es decir, sin deducción alguna.

Por otro lado, entre los gastos que se pueden declarar en la casilla 75 se encuentran los gastos de conservación y reparación del inmueble, el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), los intereses de préstamos hipotecarios destinados a la adquisición del inmueble, entre otros.

¿Cómo se calcula el impuesto a pagar en la casilla 75?

Una vez declarados los ingresos y gastos en la casilla 75, se procede a calcular el impuesto a pagar. Para ello, se aplicará la siguiente fórmula:

En esta fórmula, «Rendimientos netos del capital inmobiliario» se refiere a la diferencia entre los ingresos percibidos y los gastos declarados en la casilla 75.

En resumen, la casilla 75 se refiere al arrendamiento de un inmueble y en ella deben declararse los ingresos y gastos relacionados con dicho alquiler. Es importante tener en cuenta que todos estos datos deben ser precisos y estar debidamente justificados, ya que en caso de una posible inspección por parte de la Agencia Tributaria, se deben presentar las correspondientes pruebas y documentos que sustenten la información declarada en la casilla 75.


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