En España, la Ley del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) establece que las retribuciones satisfechas a otros miembros de la unidad familiar pueden ser consideradas como gasto deducible en la declaración de la renta.

En cuanto a las retribuciones satisfechas a otros miembros de la unidad familiar, se refiere a los gastos realizados por el contribuyente en el mantenimiento, educación y formación de los miembros de su familia. Estos gastos pueden ser deducibles siempre y cuando cumplan con ciertos requisitos establecidos por la ley y se justifiquen correctamente en la declaración de la renta.

En resumen, las retribuciones satisfechas a otros miembros de la unidad familiar son gastos deducibles en la declaración de la renta siempre y cuando se cumplan con los requisitos legales y se justifiquen correctamente. Para ello, es importante llevar un registro detallado de todos los gastos realizados en el mantenimiento y formación de los miembros de la familia.