La reducción por vivienda es un beneficio fiscal que permite a los contribuyentes españoles deducir una parte del importe invertido en la compra, construcción o rehabilitación de su vivienda habitual en la declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).

El importe de la reducción por vivienda es del 15% sobre el rendimiento neto del capital inmobiliario, con un límite máximo de 9.040 euros anuales. Sin embargo, este límite se reduce a 4.500 euros en el caso de que el contribuyente tenga derecho a deducciones por alquiler en su comunidad autónoma.

En resumen, la reducción por vivienda es un beneficio fiscal importante para los contribuyentes españoles que poseen una vivienda habitual, ya que permite reducir el importe a pagar en el IRPF. Sin embargo, es importante estar al tanto de los requisitos y limitaciones para asegurarse de que se cumplan todas las condiciones para poder aplicar esta deducción correctamente.