En España, el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) es un impuesto directo y personal que grava la renta obtenida por los contribuyentes durante un año natural. Todos los residentes en España, sean nacionales o extranjeros, están sujetos a este impuesto, siempre y cuando cumplan con cualquier tipo de actividad económica o tengan ingresos en el territorio español.

En general, se considera contribuyente del IRPF a cualquier persona mayor de 18 años que residan en España durante más de 183 días al año, aunque existen algunas excepciones a esta regla. Por ejemplo, los no residentes que obtengan ingresos en España por actividades económicas están sujetos a un régimen especial y pueden estar obligados a realizar la declaración de la renta.