Las Letras del Tesoro son títulos emitidos por el Estado español a corto plazo, con el objetivo de financiar sus necesidades de tesorería. A diferencia de otros instrumentos de deuda pública, las Letras del Tesoro cuentan con una liquidez y flexibilidad bastante alta, ya que su plazo de vencimiento suele ser de hasta 18 meses y pueden ser emitidas de forma regular por el Estado.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que las Letras del Tesoro emitidas por el Estado se consideran como un activo financiero de bajo riesgo y, por lo tanto, cuentan con una bonificación fiscal del 100% en el rendimiento neto obtenido, siempre y cuando se mantengan durante al menos un año. Esto significa que, en la práctica, la tributación sobre las Letras del Tesoro podría reducirse al 0% en caso de cumplirse esta condición. En resumen, las Letras del Tesoro pueden ser una opción de inversión interesante para los contribuyentes del IRPF, ya que ofrecen una liquidez y una seguridad elevadas y, además, pueden desgravar en los impuestos siempre y cuando se cumpla con los requisitos establecidos por la ley.