La deducción de 9040 euros por vivienda o por declarante en el IRPF es un beneficio fiscal que permite a los ciudadanos españoles reducir su base imponible y, por lo tanto, pagar menos impuestos. Esta deducción se aplica tanto a la declaración conjunta como a la individual, y puede ser aplicada por cada miembro de la unidad familiar que cumpla con los requisitos establecidos.

La cantidad máxima que se puede deducir es de 9040 euros por vivienda, independientemente de la base imponible y del número de miembros de la unidad familiar que apliquen la deducción. Esto significa que si varias personas de una misma familia son propietarias de la vivienda, cada una de ellas podrá deducirse hasta 9040 euros.

En resumen, la deducción de 9040 euros por vivienda o por declarante es una ventaja fiscal que permite a los ciudadanos reducir su carga impositiva en el IRPF si cumplen con los requisitos establecidos y han adquirido una vivienda antes del 1 de enero de 2013. Es importante tener en cuenta la relevancia de esta deducción a la hora de realizar la declaración de la renta y aprovechar al máximo sus beneficios.