Consumo de Explotación
El Consumo de Explotación es un término utilizado en el ámbito fiscal y contable que se refiere al gasto que una empresa o individuo incurre en la adquisición de bienes o servicios necesarios para su actividad económica principal. Estos gastos se consideran como parte del proceso productivo y son deducibles en la declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) en España.
Para poder deducir estos gastos en el IRPF, es necesario que estén relacionados directamente con la actividad económica principal del contribuyente y debidamente justificados mediante facturas o comprobantes de pago. Además, en caso de que los gastos sean inferiores a 3000 euros, no será necesario presentar las facturas, aunque deberán estar a disposición de la Administración Tributaria si esta lo requiere.
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