Las autorizaciones de representación permiten a un tercero actuar en nombre del contribuyente en trámites relacionados con el IRPF, como por ejemplo presentar declaraciones o recibir notificaciones. Estas autorizaciones deben ser otorgadas mediante un documento firmado por el contribuyente y el representante autorizado.

Finalmente, las autorizaciones de comunicaciones electrónicas permiten al contribuyente recibir información y notificaciones por medios electrónicos, tales como correo electrónico o mensajes de texto, en lugar de en formato papel. Para ello, es necesario que el contribuyente se dé de alta en el servicio de notificaciones electrónicas de la Agencia Tributaria y autorice expresamente su uso.