La obligación de declarar es una obligación que tienen los ciudadanos de informar a la Agencia Tributaria sobre sus ingresos y gastos en el marco del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Esta declaración es un proceso anual que se realiza en España entre los meses de abril y junio de cada año.

En España, están obligados a declarar todos los residentes mayores de 18 años que hayan obtenido ingresos superiores a los establecidos por la ley, ya sean por trabajo, actividades económicas, alquileres, ganancias patrimoniales, entre otros. También deben declarar aquellos que hayan realizado operaciones financieras como venta de acciones, fondos de inversión o cancelación de hipotecas.

En definitiva, la obligación de declarar es una importante responsabilidad ciudadana que permite al Estado recaudar los impuestos necesarios para garantizar el funcionamiento de los servicios públicos y el bienestar de la sociedad en su conjunto. Además, un correcto cumplimiento de esta obligación contribuye a mantener el sistema fiscal español justo y equitativo para todos.