El incumplimiento del fraccionamiento en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) se produce cuando un contribuyente no cumple con las condiciones establecidas para el pago del impuesto en varias cuotas durante un periodo determinado. Esto significa que el contribuyente deja de realizar los pagos acordados o no los realiza en las fechas establecidas, lo que puede tener consecuencias legales y económicas.

Sin embargo, si un contribuyente no cumple con las condiciones pactadas para el fraccionamiento, la Agencia Tributaria puede iniciar un procedimiento de diligencia de embargo para el cobro de la deuda pendiente. Esto significa que la Administración puede embargar bienes o cuentas bancarias del contribuyente para satisfacer el pago del impuesto pendiente.

En resumen, el incumplimiento del fraccionamiento en el IRPF es una situación que debe evitarse a toda costa. Si el contribuyente se encuentra en dificultades para cumplir con las condiciones pactadas, lo mejor es contactar con la Agencia Tributaria para buscar soluciones y evitar posibles sanciones y complicaciones futuras.