En la Estimación Directa del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) en España, los gastos que son fiscalmente deducibles son aquellos que están previamente autorizados y establecidos por la Administración Tributaria. Estos gastos son aquellos necesarios para la obtención de los ingresos que constituyen la base imponible del IRPF. A continuación, se detallan algunos de los gastos fiscalmente deducibles más comunes en la Estimación Directa:

2. Gastos de suministros: Se consideran gastos de suministros aquellos necesarios para el desarrollo de la actividad económica, como por ejemplo, el alquiler de un local o oficina, los servicios de electricidad, gas, agua, teléfono, entre otros.

4. Amortizaciones: La Ley del IRPF permite deducir una parte del importe invertido en la adquisición de bienes que se utilicen en la actividad económica durante su tiempo de vida útil. Esta deducción se conoce como amortización y su importe se calcula en base al método contable elegido por el contribuyente.

Es importante destacar que, para que estos gastos sean fiscalmente deducibles, deben estar debidamente registrados en la contabilidad de la empresa y contar con la documentación justificativa correspondiente. Además, deben estar relacionados directamente con la actividad económica desarrollada y ser proporcionalmente razonables en relación a los ingresos obtenidos.