En España, el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) se aplica a cualquier tipo de ingreso obtenido por los residentes fiscales en el país, ya sea de origen nacional o extranjero. Esto incluye las pensiones percibidas en el extranjero.

Por otro lado, las pensiones privadas, como las obtenidas por trabajadores que han cotizado a planes de pensiones privados, sí están sujetas a tributación en España aunque hayan sido percibidas en el extranjero. En estos casos, la pensión se considera un rendimiento del trabajo y se debe incluir en la declaración del IRPF como ingreso.

En conclusión, las pensiones percibidas en el extranjero están sujetas a tributación en España si se trata de una pensión privada, pero pueden estar exentas si se aplican las normas de doble imposición establecidas en los convenios internacionales. Es importante tener en cuenta estos aspectos al momento de realizar la declaración del IRPF para evitar ser gravado dos veces por la misma pensión.