La declaración de la renta es una obligación que tienen todos los contribuyentes en España para informar a la Agencia Tributaria sobre sus ingresos y gastos durante el año fiscal. El plazo para presentarla suele ser desde abril hasta junio de cada año, pero en ocasiones se puede extender hasta final de año para cierto tipo de declarantes. Sin embargo, si la declaración se presenta fuera de este plazo, se considera como una «declaración fuera de plazo».

En caso de que la declaración fuera de plazo resulte a devolver, la sanción se reducirá al 20% de la cantidad a devolver, con un mínimo de 200 euros. Pero si la Agencia Tributaria aplica algún tipo de recargo por no presentar la declaración en plazo, estos recargos no se verán reducidos por la presentación fuera de plazo. Es importante tener en cuenta que estas sanciones solo se aplican si la declaración se presenta de manera voluntaria, ya que si se presenta fuera de plazo por requerimiento de la Agencia Tributaria, se puede aplicar una sanción del 50%.