El aplazamiento de la declaración de renta es una opción que tienen los contribuyentes en España para diferir el pago del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF). Consiste en solicitar al Servicio de Administración Tributaria (AEAT) la posibilidad de fraccionar el importe a pagar en varias cuotas, en lugar de tener que pagarlo en su totalidad en la fecha establecida.

Entre los requisitos más importantes se encuentra que el importe total a aplazar no puede ser superior a 30.000 euros, y en ningún caso podrá ser inferior a 600 euros. Además, el plazo máximo para el fraccionamiento será de 12 meses.

Una vez presentada la solicitud, la AEAT la analizará y decidirá si se acepta o no el aplazamiento. En caso de ser aceptado, el contribuyente deberá cumplir con el pago de las cuotas en las fechas establecidas, ya que de lo contrario, se le aplicarán recargos e intereses de demora.